lunes, 9 de febrero de 2015

Podré decir muchas cosas

Supongo que los que no tenéis hermanos no entenderéis lo que escribiré ahora. Así que si queréis dejar de leer aquí, podéis. Aunque si tenéis mucha empatia, podéis seguir.

Han sido 12 años compartiendo habitación. Cientos son las veces que me he quejado por ello y miles van a ser las veces que rezaré para que algún día, sin venir a cuenta, se quede por última vez.
Y tal vez hoy no duerma como un pequeño homenaje a todas las noches que nos hemos pasado sin dormir tratando de solucionar el mundo. Han sido muchas, muchísimas charlas nocturnas. Tantas, que han llenado un álbum entero de recuerdos en mi mente. Por supuesto también han habido discusiones. Desde discutir por poner un poster de más o de menos hasta hacerlo por ver quién tenía su parte más ordenada o por dejarme o no dibujar un Peter Pan en la pared.
Y que por mucho que diga que los hermanos ahogan, son el oxigeno que te falta a veces. Que por mucho que diga que los hermanos dan muchos problemas, son muchas veces la solución a todos los problemas del mundo.
Que sí, que podré decir muchas cosas. Pero jamás llegaré a decirte tanto que equivalga a lo mucho que te quiero.
Espero que saques lo mejor de esta nueva aventura y que nunca cese la ilusión.


No hay comentarios:

Publicar un comentario